Retrato de una pasión

A mis amigos de aquí y a mis amigos de allá tengo que deciros una cosa: me ubico donde estoy. Tengo una cierta independencia que puede hacer daño, fijo, a algunas personas. El otro día unos gaúchos (muy buena gente que conocí aquí en León) se sorprenderan muchisimo cuando les dije que ya no tenía ni p..idea del fútbol brasileño. Bueno, sobre todo del fútbol gaúcho. Y no es por nada es que no lo veo. No tengo como. Eso de estar hasta las tantas de la noche no puedo. La verdad es que leo sobre ello. Busco información, sin duda. Quiero saber si Dunga va adelante con este equipo o no, por supuesto (la verdad es que creo que no va muy lejos, pero bueno...). En fin. Cosas del tricolor paulista sobre todo. Aprendi con mi padre hace muchisimo tiempo. He vivido mucho más cosas y emociones con el Sao Paulo que con cualquier otro equipo. ¡¡Joer!! Si os digo la verdad he estado más veces en el MORUMBI que en el Olímpico o Beira Rio. Bien, dicho eso, explico otra cosa. Desde que llevo aquí en este país pues me apasioné en directo por el BARÇA. La cultura tuvo comienzo desde Brasil cuando veía a los partidos de la Liga Española. Asimismo la cultura de este país. Todo. Tanto es así que el primer país extranjero que conocí -obviamente por otros intereses también- fue España, y el primer sitio, Barcelona. Julio de 1998. 35 días de gloria. Toradas, cañas, tapas, cañas, paseo de Gràcia, cañas, concierto de los Stones (inolvidable), cañas, besitos nocturnos, cañas...Y, por supuesto, partidos del Barça. Volví a la tierra brasilis con el gusto de que un día volveria a ver a esta preciosa ciudad. El amor paterno, en la cia. de mi madre, me han proporcionado otras veces más de posibilidades, han contribuido mucho con este amor con la ciudad de Gaudí, las ruinas romanas y la ciudad medieval hasta los barrios del modernismo catalán, con sus edificios característicos, sus manzanas cuadradas de cantos seccionados, sus calles arboladas y sus anchas avenidas. Barcelona es del mundo. Y tenía que ser de todos, al menos por un rato. Pero como deseo ahora hablar de fútbol porque es una de mis pasiones (así lo será para mucha gente, gracias a Dios), digo que desde que llevo aquí, entonces, he seguido más que nunca a este equipo. He llorado y he reído un sin fin de veces. Ver a los brasileños crecer tanto y jugar excelentemente bien me ha dado uno de los mejores placeres de mi existencia. Desde Brasil he visto a Romario. Aquí he visto desde el "fenómeno" hasta ahora. Mi padre suele decirme que nunca ha visto en su vida jamás algo como Pelé. Personalmente digo. Pues yo os digo que nunca he visto jamás algo -personalmente- como Ronaldinho. Fantástico. Pero en la época en el que "o guri fazia o sinal da cruz"...Algo pasó y ahí él lo cambió todo...Ah, las estrellas. Tienen que brillar eternamente. Bueno, hablar de Ronaldinho no me toca ahora. Otra vez será. Volviendo al Barça, al blaugrana, tengo que no contener mi felicidad y volverme hacia este blog para nuevamente escribir sobre él. Mucha emoción. Es que el fútbol es pasión, adrenalina, valor, creencia, suerte, paz, sentimiento...ES VIDA. Para mí fútbol es una retrato de una pasión llamada vida. Tal y cual. Lo tienes todo o no lo tienes nada. Un segundo lo cambia todo. Se precisa fe. Se tiene que tener cojones mismo, hay que luchar, hay que buscarse la felicidad. Y lo mejor de ello es que puedes participar no sólo en el campo como en la platea con otras personas. Una suerte sí de colaboración. Coordinación de ideas y gustos, ganas y deseos. Un espectáculo donde los ánimos confluyen al amor. Por que claro se debe imaginar que nada más bello será que disfrutar del contexto futbolero con amor, paz, amistad, fraternidad, etc., etc., etc. El partido de ayer fue para desencarnar. Yo mismo pocas veces he estado en tal "velocidad" de ánimo. Y mira que me encanta el fútbol y con ello quiero decir que padecido un montón. Pero ayer...¡¡Upf!! Afeeeeeeee, dirian ciertos brasileños. Fue un sueño. Hasta el último minuto no me lo podría creer. Y como cualquier apasionado del mismo, tuve mi momento de decir: "vamos, tío, se acabó, mandémonos de aquí". Qué bien que veía el partido con un tipo racional, que me hizo ver que en el fútbol SÓLO se termina cuando se acaba. En el descuento, así lo fue. Iniesta, el nombre del tipo que ha hecho el mundo cambiar en una patada. Segundos de gloria. En este momento los que ahí estuvimos fuimos todos hermanos, compañeros, hemos estado dividiendo espacios, compartiendo ánimos, coordinando esfuerzos y fe para un bien común. Me acuerdo de la Vida. Si hiciésemos algo así constantemente, con muchas cosas, a lo mejor cambiaríamos innumeros temas en una patada. Y los nombres variarían en tantos como Pedro, Paulo, jordí, Michael, Jean, Paolo, Rodri, Ricardo, Luis, María, Lisa...Formaríamos una afición de la hostia. En fin. Pensemoslo. Ahora toca el Barça. Increíble. En una patada. El fútbol es espectacular, es el retrato de una pasión. Y&R, Concept "Pasión futbolera" (2007) - Edición & FC Barcelona 06-07 Goals & FC Barcelona - More than a Club