02 mayo 2009

Italia es un país esencialmente montañoso, exceptuando la llanura del Po, y se extiende desde los Alpes hasta el centro del Mediterráneo. Comprende las islas de Sicilia, Cerdeña, Elba y otras 70 de menor tamaño. La Península Itálica alberga dos pequeños Estados independientes: la Ciudad del Vaticano, en Roma, y la República de San Marino. Los principales sectores económicos del país son el turismo, la moda, la ingeniería, los productos químicos, el automóvil y la alimentación. Las regiones del norte figuran entre las más ricas por habitante de Europa. El país ha sido anfitrión de muchas actividades humanas en tiempos prehistóricos, de aquí que se hayan hallado numerosos yacimientos arqueológicos en distintas regiones:Lacio, Toscana, Umbría y Basilicata. Tras ser el centro del vasto Imperio Romano, que dejó un inmenso legado arqueológico, cultural y literario, Italia fue asimismo el origen del humanismo medieval y del Renacimiento, que contribuyeron a forjar el pensamiento político, la filosofía y el arte europeos a través de figuras como Maquiavelo, Dante, Leonardo y Galileo. ¿¿Será poco?? La lista de artistas italianos universales es inmensa, y en ella figuran Giotto, Botticelli, Leonardo, Miguel Ángel, Tintoretto y Caravaggio. El país también ha sido cuna de compositores operísticos como Verdi y Puccini, y cineastas como Fellini. Es un país de genti importanti. Como si no bastase -y hay muchísimo más que añadir- la cocina italiana es una de las más refinadas y variadas de Europa, desde las sabrosas recetas napolitanas y calabresas hasta los preparados a base de salsa pesto de Liguria, pasando por los platos de queso y arroz (risotti) de las regiones cisalpinas. Nosotros brasileños tenemos un contacto muy muy cercano con esta cultura. A veces creo más que los españoles, franceses, portugueses y alemanes; nosotros brasileños, aunque haya tanta distancia espacial (geográfica), tenemos mucho más en común con Gli italiani. Basta con pensar en la cantidad de inmigrantes que Brasil -así como norteamérica- recibió, con los brazos abiertos, desde el país de la bota. Sao Paulo, Rio Grande do Sul, (sobre todo, pero no únicamente), sus capitales y provincias están repletas de personas que llevan en sus apellidos las marcas de éstos ciudadanos de antaño...Los Frigeri, los Matarazzi, los Settini, los Garibaldi, los Mattedi (¡¡aquí Lorenza robo el tuyo!! Fijaos el nombre de ests amiga: LORENZA, lindo lindo), los Filippini, los Barichello, los Lorenzoni, etc., etc., etc. Miles de millares (asimismo en Brasil pasa con los Alemanes, Españoles, y por supuesto, desde luego, obvio, los portugueses). Son muchos "hijos" de Italia. De ahí que haya tantos restaurantes, sitios, cine, dulces, juegos, jergas (me encanta el catsu) que retraten la realidad de esta genti. Sí, Italia es un marco mundial digno de muchisima Cultura. Infinita. Pueblo muy amigo, pueblo muy comunicativo y singular. Sui generis. Pero lo que escribo ahora, por favor, no me lo tomen a mal todos y cada uno de vosotros que os pongáis a leer esto. Y mirad que mi padre viene de este linaje italiano. Sus abuelos fueron de Firenzi. Tampoco voy a decir mucho. Cuanto menos algo grave. Lo unico que deseo hablar ahora es del personaje político italiano. Uno. Porque claro no soy experto politólogo nada de eso. Pero tengo mucha curiosidad con la cultura humana, la dos derechos aquella. Me interesa un huevo la historia de la humanidad y por ello no se me olvida JAMÁS cosas que ésta nos proporcionó. Manchas negras, cicatrices morales. Espíritus embrutecidos. Hay que perdonar y vivir. Desde luego. Hay que apagar de la mente en la vida diaria. Cierto. Hay que creer que todos nosotros vamos mejorando, siempre. Pero olvidarse, no. No es rincor ni nada. Es un mecanismo de defensa. Por de eso se trata, supongo. Aprender es...Adquirir el conocimiento de algo por medio del estudio o de la experiencia. De ahí que no se me olvide JAMÁS. Entonces los "-ismos" aquellos sirven de alerta. Si creemos que la historia es cíclica pues debemos estar en constante observación de la realidad. Criticarla para mejorarla. No rebajar de los principios humanos, de justicia, de paz social, de no a la guerra. "Todos somos iguales" y no sólo "mi casa, mis amigos y mi familia". El personaje político, este, que es único, parece no tener papas en la lengua. Le gusta mucho el show. hace lo que quiere. Sólo Dios sabrá que es lo que hace, realmente. Sin embargo tiene una popularidad de la hostia. Es que no me lo que creo. Mucha influencia. Sus bromas afectan al mundo entero y su ideología, bueno, su ideología me resulta muy pobre en Cultura, en economía social, muy débil en gastronomía política e irritantemente escasa en conocimientos ecologicos-geograficos y humanos. Sus valoración crítica me decepciona. Supongo que todo el Humanismo aquél de antaño, como movimiento intelectual, filológico, filosófico y artístico europeo estrechamente ligado al Renacimiento, se cunde en desgracia. Porque claro no sólo de buenas "scarpas" vive el hombre. A parte todo el nombre propio que me encanta (pienso en Valentina, Lorenza, Pietro, Domenico, Gina, Giovanna, etc.) poco me gusta lo que mis ojos leen ultimamente. Hoy por hoy hay un cierto teocentrismo que no me atrae. Un camino de único sentido que domina la gramatica, la retórica, la literatura, la filosofía moral (sólo es buena moral lo que la acción humana DETERMINADA entiende como tal) y, desde luego, la historia. Cuando entiendo que todo va por este camino oscuro de la Italia política actual me gusta volver hacia Sartre (con su Lo Imaginario. Psicología y fenomenología de la Imaginación), o con Shils (Los Intelectuales y el poder), o aún Chomsky (La responsabilidad de los intelectuales). Porque La ética estudia la moral y determina qué es lo bueno y, desde este punto de vista, cómo se debe actuar. Es decir, es la teoría o la ciencia del comportamiento moral. Entonces si vamos por allí prefiero hablar con gente autorizada. Si no lo entiendo al menos me obligo a una gimnasia mental, com mucho de pesas. En definitiva, los días que corren en Europa no son los mejores de la vida de los europeos. Leonardo y Galilei ya no pueden volver. Ojalá tuviésemos algo parecido. Bobbio estuvo con nosotros y mas allá de los límites de los alpes hay algo bueno también. Pero dentro de Italia ¿Habrá caldo de cultivo de buena cepa? POR SUPUESTO, imagina se no. Pero ¿podrá beberse del mismo? Buena cuestión. El teocentrismo domina. Pero Dios está en la Tierra. En Italia. Y no me refiero al Vaticano. Hay que buscar un nuevo Renacimiento. La cultura es compartir. La cultura debe estar a disposición de todos los ciudadanos. Una Glásnot a la italiana. E hoy por hoy asimismo algo de perestroika viene bien. Bueno, no creo que este pueblo que bebe tanto de los tiempos del Coliseo, de la Plaza de San Marcos, de la Torre de pisa, pueda seguir aceptandolo el Dios terreno. Algun momento esto se acabará. The thing is when??? (quizás cuando la chica de la portada de playboy italia llegue a ser representante del pueblo...¡¡ya me imagino los derechos que de eso surgirán!!).



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En un contexto creciente de urgencias prácticas, de conflictos sociales y catástrofes ecológicas, económicas y políticas, los distintos actores sociales toman posiciones que renuevan tensiones clásicas, a la vez que plantean problemas inéditos, frente a los cuales el despliegue de la razón instrumental, encarnada en el desarrollo acelerado de la ciencia y la tecnología resulta impotente.
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