La conservación de la naturaleza geológica en España tiene un seguimiento desigual. El primer Parque Nacional español, en 1918, fue Picos de Europa. Años después, otros enclaves geológicos destacados, como Lagos de Covadonga, Ordesa, Ciudad Encantada de Cuenca o el Torcal de Antequera, disfrutan de importantes medidas de protección.
- Imagen: Sander Hoogendoorn -
Sin embargo, los responsables del IGME afirman que a día de hoy el patrimonio geológico es la "cenicienta" de las políticas de conservación de la naturaleza. Los expertos de esta institución científica subrayan que la destrucción de los lugares de interés es casi siempre irreversible, por lo que la prevención y la planificación son básicas.
El Proyecto Global Geosites trabaja para identificar los lugares más vulnerables. Los responsables institucionales podrán establecer así prioridades para su protección. Algunos expertos recuerdan que este catálogo podría llegar tarde a algunos enclaves que sufren un fuerte deterioro. En los años ochenta, uno de los pioneros de la investigación geológica en España, Emilio Elízaga, realizó un inventario de LIG de la provincia de Madrid. En la actualidad, el 30% de estos lugares ha desaparecido.
Los expertos recuerdan que la presión urbanística o las obras públicas destruyen parte de este patrimonio geológico, antes incluso de que llegue a catalogarse. Algunos de los 144 LIG que distingue el Proyecto Global Geosites están en peligro, recuerdan sus responsables.
Razones para proteger la geodiversidad
La presión urbanística o las obras públicas destruyen parte de este patrimonio geológico, antes incluso de que llegue a catalogarse
La protección del patrimonio geológico es importante por varias razones. Los mismos argumentos que sirven para defender la biodiversidad, pueden utilizarse en este caso para la geodiversidad. Su valor ecológico y económico es evidente: además de ser el hogar de todos los seres vivos, constituye una fuente de recursos naturales claves para el desarrollo de las actividades humanas. La conservación de este patrimonio es una responsabilidad de todos: su destrucción deja a las generaciones futuras sin la posibilidad de su conocimiento y disfrute.
La geodiversidad puede ser también un recurso importante para el desarrollo local. Basta recordar las actividades industriales ligadas a este patrimonio o la atracción de un nuevo turismo geológico.
El valor científico que aporta es considerable. Los procesos geológicos discurren en un espacio temporal enorme. La actual geodiversidad española es resultado de una compleja y dilatada historia geológica, en especial a lo largo de los últimos 700 millones de años. Como explica la ley 42/2007, el patrimonio geológico permite "conocer, estudiar e interpretar el origen y evolución de la Tierra, los procesos que la han modelado, los climas y paisajes del pasado y presente, y el origen y evolución de la vida".
- Imagen: Albert -
Además de los bienes in situ, no deben olvidarse las colecciones de fósiles y minerales que se encuentran en los museos y que cumplen una labor cultural, pedagógica, divulgativa y científica.
Las instituciones son cada vez más conscientes de la importancia de conservar este patrimonio. Diferentes leyes se encargan de manera directa de gestionar y proteger los valores naturales. Además de la citada ley del patrimonio natural y la biodiversidad, se incluyen en este grupo normativo la ley para el desarrollo sostenible del medio rural, la ley de la Red de Parques Nacionales y la de Patrimonio Histórico Español. Las comunidades autónomas también cuentan con un marco legislativo extenso ligado a estos aspectos, mientras otras leyes tienen relación, aunque de manera menos directa, con la gestión de la riqueza geológica.
Para más info visite:
http://www.consumer.es/web/es/medio_ambiente/naturaleza/2009/09/28/188234.php
por ALEX FERNÁNDEZ MUERZA